En julio comienza la temporada del bonito del norte y se extiende hasta el mes de octubre. En los meses de verano, sobre todo a partir de agosto, está en su punto más óptimo y a tu alcance en nuestra pescadería.
Es una de las grandes estrellas de la cocina vasca, aunque en todo el litoral cantábrico y otras localidades interiores del norte, tiene una enorme popularidad. Este túnido estacional debe su apellido a las zonas de España donde se captura, justo en el mar Cantábrico, donde se sigue una pesca tradicional y sostenible.
Es un pescado con unos valores nutricionales muy interesantes: tiene un gran contenido en proteínas de alto valor biológico; también es rico en vitaminas del grupo B, con una buena cantidad de B12, también muestra altos índices de minerales esenciales para el ser humano. El aporte de Omega 3 es perfecto para mantener la buena salud cardiovascular y, en cuanto a calorías, estas son moderadas. En resumen, es un pescado saludable e idóneo para formar parte de una dieta equilibrada.
Podemos disfrutar de sus beneficios durante todo el año gracias a las conservas aunque, si en verano lo tenemos fresco, ¿no es mejor aprovecharlo?
En general, la carne del bonito del norte es muy jugosa, tersa y con un sabor profundo y delicado, y puede elaborarse de distintas formas sin perder su textura firme. Es su contenido graso el que le convierte en un pescado muy jugoso aunque hay que tener cuidado con las cocciones muy largas para evitar que se reseque. El bonito del norte está en su punto perfecto cuando alcanza una tonalidad rosada.
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Es un guiso propio de pescadores vascos que la propia gastronomía de Euskadi elevó hasta los altares. En el recetario antiguo, no contenía patata ni pimiento, ya que lo elaboraban en alta mar con el pescado recién sacado del agua. En los marmitako actuales, las hortalizas son ingredientes elementales.
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Un guiso muy ligero en el que únicamente se estofan las hortalizas y los lomos de bonito se cuecen con una de las técnicas más sencillas y saludables: a la plancha o sartén. De este modo, el bonito pasa por una cocción corta que le permite mantener su jugosidad y textura.
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Un plato muy completo (lleva alimentos saludables como legumbres, hortalizas, el propio pescado y semillas de sésamo, que contienen una buena cantidad de calcio), muy fácil de preparar y extremadamente veraniego.
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Esta receta de inspiración asiática puede tomarse como una cena completa y ligera. Se elabora con ingredientes saludables como jengibre, verduras y sésamo, y tiene toques de sabor intenso gracias al wasabi, a la salsa de soja y al jengibre.
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Receta sofisticada de ventresca a la barbacoa debido a la preparación previa de una salsa que se elabora a partir de pimientos choriceros, tomate y recortes de la ventresca que dan al plato un profundo sabor.
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El bonito del norte es un pescado ideal para preparar escabechado, y en nuestra selección no podía faltar este tipo de preparación. Es un plato muy sabroso que, además, se conserva durante algunos días en la nevera sin perder sus cualidades organolépticas.
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Una receta de bonito del norte mar y montaña que incluye toques de jamón ibérico sin quitar protagonismo a un bonito del norte que resulta muy jugoso y con una textura crujiente aportada por el pan rallado.
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