CHARLES JACQUIN

 Las conservas Charles Jacquin se elaboran siguiendo los mismos métodos utilizados tradicionalmente por los campesinos franceses, cociéndose lentamente en cubas especiales para obtener el sabor de la fruta. La selección de las piezas que se utilizan se realiza según rigurosas normas.

Cada cosecha se estructura en pequeños lotes para asegurar la inspección cuidadosa de cada una de las etapas de producción. Los productos Charles Jacquin se caracterizan por su alto contenido en fruta, y su elaboración con ingredientes totalmente naturales, sin conservantes, colorantes o aditivos. Son endulzadas solamente con zumo de uva totalmente natural, lo que proporciona un sabor mucho más ligero y auténtico que si se utilizara azúcar.

Estas mermeladas son toda una delicia, desde el clásico desayuno de tostadas, hasta la hora de la merienda, complementando bollería y batidos de leche. También se pueden disfrutar en compañía de un yogur o sobre un helado de vainilla, así como de condimento que acompaña a la perfección platos de asados de carne y aves.

LECCIÓN DE HISTORIA

Según los historiadores gastronómicos la mermelada fue creada por un médico para los mareos que sufría María Estuardo, reina de Escocia, pero parece que ya los griegos cocían membrillos en miel, según se recoge en el libro de cocina del romano Marco Gavio Apicio titulado De re coquinaria.

Otra versión dice que la palabra mermelada es una pequeña deformación de la expresión francesa Marie malade (María enferma), ya que la fruta cocida y endulzada era la dieta para los niños después de una indigestión. Sin embargo, la mayoría piensa que la palabra proviene del portugués marmelo (membrillo), fruto que originalmente se utilizaba para la preparación de la mermelada. El término aparece por primera vez impreso en inglés en 1524.