El vino es un producto cada vez más reconocido y apreciado en todo el planeta. A la lista de los países productores clásicos, como España, Italia o Francia, se suman otras naciones europeas, americanas o de Oceanía para proponernos propuestas súper atractivas como algunas de las que te presentamos a continuación.
En Alemania son muy famosos los vinos basados en uvas blancas (el 70% de la producción de vino en ese país se elabora con uvas blancas). Y de todas las variedades de uvas blancas germanas, la Riesling es la más célebre. Precisamente con esta uva se elabora Blue Nun, un vino en el que destaca el tono cálido y afrutado de esta uva. Este monovarietal de la bodega Langguth tiene un aroma intenso en nariz, afrutado y sutil, mientras que en boca destaca por su equilibrio entre la acidez y la dulzura. Es ideal para acompañar platos a la parrilla.
Si pensamos en vinos portugueses, los primeros que nos vienen a la cabeza son los vinos de Oporto. Y un gran exponente de estos vinos generosos es el Tawny de Poças. Como buen Tawny, se caracteriza por su envejecimiento en barricas de roble, lo cual le otorga una textura única y una complejidad de sabores. Tiene un precioso color ámbar y un sabor suave y afrutado. Su aroma delicado y sus notas de frutos secos y de caramelo lo convierten en una elección perfecta para maridar tanto con quesos maduros como con postres elaborados a base de chocolate o frutos secos. También es perfecto como vino de sobremesa, para degustar una copa tranquilamente después de la comida.
Estados Unidos, y concretamente la región de California en la costa Oeste, es una gran zona de producción vinícola a nivel mundial. Y uno de los grandes productores de vino de California es el multifacético director de cine Francis Ford Coppola. El director de cintas míticas como El Padrino o Apocalypse Now adquirió en 1995 unos viñedos en el valle de Napa, y desde entonces produce unos vinos de gran consideración. Coppola Chardonnay es un vino blanco de sabor fresco y afrutado, con notas de manzana verde, melón y cítricos. Su textura suave y equilibrada y su cuerpo medio lo convierten en una elección versátil que marida perfectamente con una amplia variedad de platos como mariscos, pescados, aves de corral, ensaladas y platos vegetarianos. También es un vino ideal para tomar en el aperitivo.
Que la industria del vino está creciendo en el cono Sur del continente americano es un hecho. Se refleja en datos como que el quinto país productor del mundo es Argentina y el séptimo Chile. Dentro de Argentina, la región de Mendoza, en el este del país, y concretamente el valle de Uco, es una potentísima región vinícola donde se elaboran miles de vinos cada año. La uva Malbec, proveniente de Francia, es una uva que ha arraigado a la perfección en Argentina, y que ofrece unos vinos excelentes. Como Trumpeter, de las bodegas Rutini, que mezcla la Malbec con la Syrah, y la crianza de siete meses en barricas de roble americano y francés para ofrecernos un tinto de profundos tonos rubí y matices púrpura, y con gran cuerpo y estructura vivaz, que resulta ideal para acompañar carnes a la parrilla, quesos curados y pastas rellenas con salsas a base de carne.
En el vecino Chile, se encuentra el valle de Colchagua, una zona ideal para el cultivo de la vid, debido a sus suelos de cenizas volcánicas y a la influencia fría del Océano Pacífico. Allí se encuentran los viñedos donde se elabora Los Vascos, un Cabernet Sauvignon 100% de gran personalidad y estilo frutal. Es un tinto rojo rubí brillante con aromas a cerezas, fresas y ciruelas, junto con clavo y nuez moscada. Mientras que en boca ofrece robustez y se notan sus taninos frescos, suaves y persistentes.
Seguimos en el hemisferio Sur, y acabamos nuestro viaje alrededor del mundo del vino en Australia. En ese gigantesco país, concretamente en la región de Yenda, se encuentra la bodega Casella Wines, con 6 generaciones a sus espaldas de productores de vino en su Italia natal, donde elaboran los vinos Yellow Tail (“Cola amarilla”). Estos vinos han cosechado un gran éxito internacional, ya que producen 100 millones de litros al año y se venden en 40 países. Dentro de su amplia gama de vinos, el Yellow Tail Chardonnay es un vino blanco de estilo fresco y ligero, agradable y refrescante. A la vista es amarillo dorado, limpio y brillante. En nariz encontramos aromas a frutas tropicales, limón y melocotón con un trasfondo a vainilla. Mientras que en boca detectamos el punto cítrico con un final prolongado de melocotón y especias. Un gran vino apto para todos los paladares, y que combina a la perfección con platos de marisco, pescado o postres.
Y ahora que ya conoces un poco más de estos vinos internacionales… ¿a qué país te apetece “viajar” hoy?
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