Cada vino tiene la suya y debemos tenerla en cuenta para conseguir los mejores resultados de cada uno de ellos. Una pequeña guía orientativa puede ser: • Blancos jóvenes y Cavas: entre 5 y 8ºC • Rosados y blancos con crianza: entre 10 y...
Cada vino tiene la suya y debemos tenerla en cuenta para conseguir los mejores resultados de cada uno de ellos. Una pequeña guía orientativa puede ser:
• Blancos jóvenes y Cavas: entre 5 y 8ºC
• Rosados y blancos con crianza: entre 10 y 12ºC
• Tintos jóvenes: entre 12 y 14ºC
• Tintos con crianza (Crianzas, Reservas y Grandes Reservas: en función del vino y el tiempo de crianza, entre 16 y 20ºC. Estos vinos agradeceran que se les abra con una cierta antelación, puesto que la oxigenación les ayudará a desplegar todo su potencial aromático y gustativo.