Pollo de corral, con mucho gusto

Su color intenso, su sabor único, la consistencia de su carne y sus múltiples posibilidades gastronómicas hacen del pollo de corral El Corte Inglés una de las carnes más deliciosas y la preferida de los que buscan sensaciones naturales.

Sabor, sabor

Los pollos de corral viven en semilibertad, su crecimiento es más lento que el de los pollos convencionales y viven, al menos, hasta los 70 días. Por eso, comer estas aves es un regreso a una textura y un sabor más auténticos e intensos. Frente a la carne blanca, tan característica de las aves de granja, la de los pollos de corral presenta un color más oscuro, y una piel más amarillenta. Esto es así, no solo por las condiciones de cría, sino por su alimentación, a base de maíz y otros cereales. Por eso, estos pollos de corral de El Corte Inglés, enteros o despiezados  (en jamoncitos, muslos, traseros y contramuslos), son ideales para ser asados, acompañados de verduras o patatas y aromatizados con hierbas silvestres. Además de resultar riquísima, su carne es muy ligera y tiene muy pocas calorías.

Más jugoso

Por la intensidad de su sabor y la consistencia de su carne, el pollo de corral resulta ideal para prepararlo al horno. Si decides asarlo entero y evitar que las pechugas queden secas, lo ideal es colocarlo boca abajo. También puedes inyectar la piel con agua y sal, con vino, con algún licor y utilizar verduras con alto contenido en agua, como hemos hecho con este pollo al estilo oriental. Además, para potenciar el sabor, puedes utilizar las ayudas culinarias, como los saborizantes de Knorr que aportan matices aromáticos deliciosos. Para mantener la jugosidad, puedes utilizar también las bolsas especiales de ayudas culinarias para horno.

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