Pasar las truchas por agua, escurrirlas y secarlas con papel absorbente. Sazonar por dentro. Meter en su interior 1 ramita de tomillo. Untar una fuente de horno con 1 cucharada de aceite de oliva. Precalentar el horno. Rociar las truchas con el aceite restante y meter durante 10 minutos en el horno a 190 ºC. Calentar el pisto y servirlo de guarnición con las truchas. Nota. Podemos hacer el pisto casero. Necesitamos: 1 calabacín, 1 cebolla, 1 pimiento rojo, 1 pimiento verde, 1 berenjena, 4 zanahorias, 1 lata de tomate triturado o 4 tomates maduros, 1 cucharada de azúcar, aceite de oliva para sofreír todo y sal.
Revuelto de verduras
El pisto manchego, presente en la cocina española desde el siglo XVII, no tenía en su receta original todas las verduras y hortalizas que le añadimos hoy en día. Básicamente se hacía con pimientos y tomates, productos de la huerta que estaban disponibles. Con los años se le fue sumando el calabacín, la cebolla y el ajo. Al añadir berenjena lo convertimos en Ratatouille.
Las espinas de la trucha
La trucha es un pescado de agua dulce de la familia de los salmones y con un sabor muy intenso. Es excelente para hacerla frita o al horno, ya que es la mejor manera de quitar fácilmente las espinas que se nos hayan quedado en el proceso de limpieza. Las espinas de la trucha no son fáciles de eliminar, ya que son más finas y pequeñas que las de los peces de mar de su mismo tamaño.
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