Las 9 mejores impresoras para casa

Normalmente, decimos que la mejor calidad de impresión es aquella que brinda la mayor resolución, es decir, el máximo número de puntos por pulgada lineal. Esta medida suele expresarse por las siglas PPP o DPI (dots per inch). Dicho de otra forma, este es el número de microgotas de tinta o partículas de tóner que se quedan adheridas a una hoja de papel por cada pulgada (2,54 centímetros).

¿Qué calidad es la mejor para imprimir? En gran medida eso dependerá del trabajo que estemos realizando. Una impresión de 300 PPP puede ser suficiente para borradores de texto con un tamaño de fuente normal, pero podemos subir a 600 PPP si queremos hacerlo más presentable o hay letra pequeña. Para fotografías, 1.200 PPP nos brindará una buena calidad dentro de la gama de impresoras domésticas. No obstante, las impresoras fotográficas pueden alcanzar una resolución aún mayor, superando los 5.000 PPP. Si vamos a imprimir principalmente este tipo de trabajos, deberemos buscar una impresora especializada.

Por supuesto, hay que tener en cuenta que una mayor resolución de impresión implica un mayor consumo de tinta o tóner, por lo que en muchos casos la resolución más adecuada depende también de cuánto queramos que nos duren los cartuchos o las cargas correspondientes.

La duración de una impresora podemos separarla en dos aspectos diferenciados: la duración de la máquina en sí misma y la duración de su tinta o tóner. De forma general, las impresoras de inyección de tinta son más aptas para un uso doméstico (entendiendo por ello una impresión esporádica) que profesional.

Si hablamos de resistencia, las impresoras láser han sido diseñadas para un uso más intensivo (profesional o semiprofesional) y poseen, por tanto, una construcción más duradera. Sin embargo, son más voluminosas y utilizan un mayor número de componentes que pueden tener que ser sustituidos a largo plazo.

Por otro lado, normalmente las impresoras láser poseen cartuchos de gran tamaño que dan para muchas impresiones, especialmente los modelos de blanco y negro. Son la opción más económica si solo vamos a imprimir texto monocromo. No obstante, los últimos modelos de impresoras de tinta poseen programas de suscripción con renovación de cartuchos, así como depósitos rellenables con botellas para un uso más continuado. Son una buena opción si vamos a imprimir muchos documentos a color.

Tenemos otro artículo en el que te explicamos qué tipo de impresora necesitas y cuál es más conveniente, en el que tienes un análisis detallado acerca de los tipos de impresora existentes y cuáles son los idóneos para cada necesidad. A modo de resumen, esto es lo que debemos tener en consideración:

• La inyección de tinta es la tecnología de impresión todoterreno, que tanto sirve para un uso doméstico como para un uso profesional o educativo, siempre y cuando no tengamos que imprimir un número de hojas al mes que haga conveniente dar el salto a una láser.
• El láser está orientado a grandes volúmenes de impresión. Es cierto que hay modelos de inyección de tinta con depósito recargable que permiten imprimir hasta 12.000 páginas en negro y 8.000 en color, pero el láser, especialmente el monocromo, es una elección óptima para volúmenes de impresión altos, con costes por página muy competitivos.
• Los modelos portátiles, por su parte, están ganando adeptos como una extensión del móvil para una impresión instantánea a través de la app correspondiente.
• Si atendemos a la funcionalidad, tenemos equipos multifuncionales, fotográficos o convencionales, de impresión sin más. Los multifuncionales comparten la impresión con la digitalización de documentos a través del escáner integrado.
• Para quien apueste por la conectividad, presente en la mayoría de productos actuales, el uso de redes Wi-Fi permite imprimir documentos directamente desde el móvil o la tablet. O incluso alojar la impresora en una habitación distinta de donde reside el ordenador.

A continuación, te ofrecemos una selección de impresoras para casa que te serán muy útiles para tareas domésticas o para ayudarte si estás trabajando en remoto. Entre ellas, seguro que encontrarás alguna que se adapte a tus necesidades como un guante.

El tipo de impresora que mejor encaje en tu casa dependerá fundamentalmente del uso que le vayas a dar. Los estudiantes, por ejemplo, suelen imprimir trabajos con imágenes, pero no en el volumen suficiente para justificar una impresora láser a color. Un modelo de inyección de tinta puede ser suficiente. Si además tiene que sacar fotocopias o necesita escanear documentos, es importante que sea de tipo multifunción.

Para una oficina doméstica podemos inclinarnos por dos opciones: las impresoras de tinta rellenables, más asequibles para trabajar con gran volumen, o las impresoras láser. Las primeras son una excelente opción si imprimimos folletos y otros documentos a color con cierta frecuencia. Las segundas, son ideales si la mayor parte de nuestro trabajo requiere impresión de texto en blanco y negro en cantidad.

Como recomendación general, y aunque a día de hoy virtualmente todas tienen esta función, presta atención a si la impresora tiene conectividad Wi-Fi, que hoy en día es lo habitual salvo en los modelos más básicos. Puede ser interesante si en casa hay varios ordenadores, pero solo una impresora compartida.

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