¿Necesitas una entrega rápida?Entrega inmediata en menos de 2 horas o en el tramo que tu elijas de hasta 15 productos diferentes en una gran selección de artículos y marcas.
Para que una sala de TV suene como un auténtico "cine en casa", existen soluciones que sacan todo el partido al sistema de audio del televisor. Desde consejos para mejorar su configuración, hasta accesorios de última generación para lograr una experiencia envolvente.
De un tiempo a esta parte, los fabricantes de televisores han priorizado la extrema delgadez de sus productos. El resultado son pantallas extrafinas con un diseño extraordinario y marcos mínimos, capaces de integrarse en cualquier salón casi como si fueran una pieza de decoración. Algunos modelos concretos presumen de brindar además un sonido más que aceptable, pero por lo general, disfrutaremos de una mejor calidad acústica si utilizamos altavoces externos.
Sin hueco para integrar unos buenos altavoces como en las antiguas teles de tubo, algunas personas notan que series y películas suenan menos naturales en los modelos de última generación. Afortunadamente, hay soluciones para mejorar el sonido de nuestro televisor.
Revisar la configuración del televisor
Televisor Samsung
Todos los televisores modernos incorporan funciones de procesamiento de audio. Si bien en un principio la idea general es hacer que suene más espacioso y preciso, en algunos casos el efecto puede ser un poco artificial. Por ello, puede ser recomendable comprobar qué opciones brinda nuestro televisor.
Dependiendo del modelo, dentro de la configuración del televisor debería haber un apartado dedicado al sonido donde encontraremos la posibilidad de ajustar los agudos y bajos de forma independiente, así como seleccionar modos "deporte", "cine" o "videojuegos". Prueba a tocar las opciones y comprueba cuál te gusta más.
Instalar una barra de sonido
Las barras de sonido se han convertido en una estupenda opción para mejorar el audio de cualquier televisor. En muy poco espacio pueden brindar sonido envolvente de buena calidad, y algunos modelos aportan altavoces adicionales (como un subwoofer) para reforzar los tonos graves. Su conexión se puede realizar por cables o Bluetooth, así que también puede funcionar como altavoz inalámbrico para tu teléfono.
Recomendables para: salones con poco espacio, presupuestos reducidos a intermedios.
El DVD impulsó la venta de este tipo de sistemas a su máxima popularidad, pero el streaming y la desaparición de los reproductores externos los han convertido en una opción para los usuarios más exigentes. Los Home Cinema proporcionan sonido multicanal real, lo que quiere decir que podremos oír al "malo" de una película acechándonos por nuestra espalda o sentir los disparos de un tiroteo por todo el salón.
Un equipo 5.1 requiere un amplificador/receptor. Este elemento se ocupa normalmente también de procesar y decodificar el sonido envolvente correspondiente (DTS, Dolby Digital o cualquier otra tecnología) para enviarlo correctamente a cada uno de los altavoces de forma independiente. Ocupan más espacio, pero son la mejor opción si queremos montar un auténtico cine en casa.
Recomendables para: usuarios exigentes que buscan la máxima calidad y no tienen problemas de espacio.
Los altavoces activos no requieren una etapa de amplificación, por lo que los podemos conectar directamente al televisor. Normalmente esto se realiza usando conectores RCA o el minijack de 3,5 mm para auriculares. No han sido diseñados para proporcionar sonido envolvente (lo corriente sería una configuración estéreo de solo dos altavoces), pero a cambio su calidad es extraordinaria.
Recomendables para: salones con mayor espacio, aficionados a la música
Si no hay mucho presupuesto, el espacio es un problema o no queremos molestar a nadie, los auriculares pueden ser una buena opción. De hecho, los hay con unas prestaciones sobresalientes, superando con mucho la calidad que pueden brindar los altavoces integrados en el propio televisor. Su sonido es además muy inmersivo, por lo que son perfectos para los aficionados a los videojuegos.
Recomendables para: situaciones en las que no se quiere molestar, presupuestos ajustados y videojuegos.