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Tipos de cafeteras y cómo elegir la más compatible con tus hábitos y gustos
A todos nos encanta el aroma de un buen café por la mañana, pero a la hora de preparar nuestro favorito es muy posible que no coincidamos en nada más, por eso, acertar con la cafetera que mejor se adapte a nuestros gustos y necesidades es tan importante.
Hay tantas maneras de tomar el café como amantes de esta bebida y no nos referimos solo a si es con más o menos leche, con o sin azúcar, o si nos gusta con espuma o crema.
Seguro que ya tienes claro cómo es tu café favorito, la procedencia, el tipo de tostado, la acidez, el cuerpo… pero, ¿con qué cafetera es mejor prepararlo en casa?
1. CAFETERAS DE GOTEO
El funcionamiento de las cafeteras de goteo es el más sencillo. El agua del depósito se calienta y pasa por un filtro denso donde hemos colocado el café, y se va depositando, gota a gota en la jarra. Estas son sus principales características:
Ideales para quienes prefieran un café más suave, ligero y poco concentrado. Aunque a los amantes del espresso les puede parecer aguado.
La jarra está situada sobre una placa metálica que mantiene el café caliente.
Sirve para preparar grandes cantidades de café de una sola vez.
No hace falta estar pendiente. Solo tenemos que añadir el agua, el café, encenderla y esperar.
Algunas se pueden programar para tener el café listo cuando nos suene el despertador.
Si el filtro es permanente requerirá limpieza después de cada uso, aunque también hay filtros desechables.
No son ruidosas.
Se limpian muy fácilmente.
Podemos encontrar opciones muy económicas.
Hay modelos especiales que cuentan con un molinillo integrado para tomar el café recién molido, como la cafetera de goteo automática Haeger Perfect Drip.
Las cafeteras de cápsulas, hacen pasar agua muy caliente a alta presión a través de las cápsulas, que contienen café molido muy fino. Algunas de sus ventajas:
Para los que buscan variedad y calidad en los cafés, de forma rápida y cómoda.
Al igual que ocurre con las cafeteras espresso y super automáticas que veremos a continuación, con las cafeteras de cápsulas, a mayor presión (bares), más cuerpo y cremosidad tendrá el café.
Son muy fáciles de usar, ponemos la cápsula, le damos a un botón y listo.
El tiempo de preparación de cada café oscila entre medio minuto y un minuto.
Hay una amplia oferta de cápsulas para variar cada día.
Algunas de estas cafeteras también preparan cafés con la leche incorporada (cappuccino, latte etc.), chocolates, tés y otras infusiones.
El resultado de cada bebida siempre será el mismo, ya que cada cápsula contiene la dosis adecuada.
Al ser monodosis nunca sobra café.
El café se mantiene fresco más tiempo, aunque perdemos la opción de tomarlo recién molido y el precio de las cápsulas es más elevado que el del café por paquetes de kilo.
Tiene un escaso mantenimiento o limpieza.
Una vez a la semana es recomendable llenar la cafetera de agua y ponerla a funcionar sin ningún tipo de cápsula, para limpiar los conductos internos, y descalcificar una o dos veces al año.
Las bandejas antigoteo y los depósitos para cápsulas usadas se pueden desmontar y limpiar en el lavavajillas.
Como cada cafetera es compatible con diferentes marcas y variedades de café, el precio de las cápsulas y su disponibilidad es clave a la hora de elegir la cafetera.