Eligiendo el anillo de pedida

Elegir el anillo de pedida es una aventura que refleja vuestra historia y vuestro amor. Es un momento muy especial que puede resultar un poco abrumador, y por eso hemos preparado esta pequeña guía para ayudaros a descubrir juntos el anillo perfecto para sellar vuestro amor. 

¿Quién elige el anillo? ¿Él, ella o los dos? 

Esta es la gran pregunta. Antes, era tradición que el novio sorprendiera a la novia con el anillo, pero hoy en día muchas parejas prefieren elegirlo juntos. Si sois más de tradiciones, quizás él quiera mantener la sorpresa, pero también podéis hablar abiertamente y decidir qué os hace más ilusión. ¡Lo importante es que os sintáis cómodos y felices con vuestra decisión!

¿Cómo elegir el anillo perfecto?

El anillo de pedida es una pieza que acompañará siempre a la novia, así que es normal querer acertar al 100%. Por eso, es fundamental tener en cuenta varios factores:

• Estilo personal de ella: ¿es más de clásicos atemporales o le gusta lo moderno y llamativo? Fíjate en su forma de vestir y en las joyas que suele llevar. Eso te dará pistas sobre qué tipo de anillo la enamorará.
• Material: el oro (amarillo, blanco o rosa) es el clásico de siempre, pero el platino también es una opción súper elegante y resistente. Si buscáis algo diferente, podéis explorar materiales como el paladio o el titanio.
• Piedra preciosa: el diamante es el rey de los anillos de pedida, pero no es la única opción. Piedras como el zafiro, el rubí o la esmeralda también son preciosas. Si queréis algo más original, podéis optar por piedras semipreciosas como la aguamarina o la amatista.
• Talla: ¡este punto es clave! Si no estás seguro de la talla, puedes medirle el dedo mientras duerme o "tomar prestado" uno de sus anillos para que te sirva de referencia.

Ideas de anillos que enamoran:

El solitario, un clásico atemporal

El solitario es un anillo clásico que nunca pasa de moda. Tiene un solo diamante o piedra preciosa, montado sobre una banda sencilla de oro, platino o plata. Su diseño minimalista resalta la belleza de la piedra central, que suele ser redonda. Es ideal para quienes buscan elegancia sin complicaciones, el solitario es versátil y combina con cualquier estilo, desde lo más clásico hasta lo moderno.

Anillo con pavé, un toque extra de brillo

El anillo con pavé se caracteriza por su banda cubierta de pequeñas piedras preciosas, que crean un efecto brillante y luminoso. Este diseño, puede incluir un diamante central o destacar únicamente por su delicado engaste de piedras. Si os gusta el brillo, un anillo con diamantes pavé es una opción súper elegante.

De tres piedras, una pieza llena de simbolismo

El anillo de tres piedras representa el pasado, el presente y el futuro de una relación, con tres diamantes o gemas que simbolizan la continuidad del amor. La piedra central suele ser un diamante, y las laterales pueden ser diamantes más pequeños u otras piedras preciosas, creando un equilibrio perfecto y un aspecto llamativo. Ideal para quienes buscan un diseño con significado y elegancia.

El anillo halo y su efecto cautivador

El anillo halo se caracteriza por un diamante o piedra central rodeada de un círculo de pequeñas gemas, que realzan su brillo y tamaño. Este diseño, deslumbrante, ofrece un efecto óptico que hace que la piedra principal parezca más grande y luminosa. Perfecto para quienes buscan un toque de glamour y sofisticación.

¿En qué dedo se lleva el anillo de pedida?

Tradicionalmente, el anillo de pedida se lleva en el dedo anular de la mano izquierda, porque se creía que este dedo estaba conectado directamente al corazón por la "vena del amor". Pero hoy en día, muchas mujeres eligen llevarlo en la mano derecha o incluso en otro dedo. ¡Lo importante es que estés cómoda con la elección!

¿Se puede personalizar el anillo?

¡Claro que sí! Si queréis que sea único, podéis añadir un grabado con vuestros nombres, la fecha de vuestro compromiso o un mensaje especial. También podéis elegir una piedra preciosa que tenga un significado especial para vosotros o incluso diseñar el anillo desde cero con la ayuda de un joyero.