ISMAEL SERRANO

Ismael Serrano Morón (Madrid, España, 1974) es un cantautor español. Su aparición en la década de los noventa supuso una renovación dentro de la escena española, reivindicando la canción protesta y actualizando los postulados de Luis Eduardo Aute, Silvio Rodríguez, Mercedes Sosa o Joan Manuel Serrat, con el que se le comparó en sus inicios.

El vallecano, que alternó sus estudios de Ciencias Físicas en la Universidad Complutense con los de solfeo y piano, pronto comenzó a hacerse con un nombre entre la ruta habitual de locales con música en directo hasta que una discográfica apostó por él. Su espíritu crítico y el compromiso con la sociedad son una constante en sus letras.

"Papá, cuéntame otra vez ese cuento tan bonito / de gendarmes y fascistas, y estudiantes con flequillo?". Con esos versos arrancaba Atrapados en azul (1997), su debut. "México insurgente" es otro de los temas que marcan la pauta en la trayectoria de un artista que tiene un pie en España y otro en Hispanoamérica, tanto estilística como políticamente. Son varios los movimientos sociales -las Madres de la Plaza de Mayo en Argentina o los zapatistas en el país azteca- a los que ha mostrado su apoyo.

La desnudez de su estreno, en el que prácticamente se valía de la guitarra y su voz como único medio expresivo, se prolongaba en La Memoria de los Peces (1998). Los Paraísos Desiertos (2000) muestra a un Serrano que comienza a abrir sus horizontes sonoros, más cercanos al jazz ligero. "Km. 0" o "La huida" se incorporaron rápidamente al listado de favoritas de sus seguidores. Este cambio de rumbo se hizo más palpable en La Traición de Wendy (2002), con la presencia de secciones de viento y el bandoneón.

Poco tardó en llegar Principio de Incertidumbre (2003), un directo en el que se rodeaba de invitados como Pedro Guerra, Lichis -La Cabra Mecánica- o Luis Eduardo Aute y en el que incorporaba varias composiciones nuevas, como "Zona cero" y "Aquella tarde", su lectura del 11-S. Naves ardiendo más allá de Orión (2005) es uno de sus álbumes más optimistas y maduros. Tal vez era su reacción a lo ocurrido en Madrid el 11 de marzo del año anterior, como canta en "Fragilidad": "Quizá no sea indestructible / el trueno del fusil, tanto dolor, / la burbuja que encierra este grito / y este temor / a saberme perdido, / a perderte y perder la razón".

Sueños de un hombre despierto (2007), lleno de imaginería proveniente de la mitología clásica, fue un vuelta de tuerca a sus texturas sonoras. El uso del sitar y composiciones cercanas al pop como "Casandra", así lo acreditan. Acuérdate de vivir (2010) y Todo empieza y todo acaba en ti (2012) mantuvieron el notable rendimiento creativo y comercial de sus predecesores.

La llamada (2014) es su primer disco tras ser padre, un trabajo con una fuerte influencia de ritmos como la bachata, el candombe o la samba. Una colección de canciones "con carácter reivindicativo y de celebración que llaman a huir del inmovilismo y de la resignación", en palabras de su autor.