Una fragancia floral-afrutada en un frasco de líneas redondeadas.
Un soplo de ternura y de suavidad que le arrastra hacia su torbellino de felicidad y fantasía.
Una cita olfativa con la suerte.
Aparece y desaparece, nunca se detiene... y sólo tienes unos segundos para atraparla.
Es imprevisible y surgeallí donde no se la espera.
Pero, si tú lo decides, todo es posible.
'La suerte se presentó ante mí, y la aproveché.'
Mademoiselle Chanel sabía que la verdadera suerte era la que ella provocaba, un estado de ánimo, una manera de ser.