La música de cámara dedicada a la guitarra escrita entre los siglos XVIII y XIX fue compuesta casi en su totalidad por compositores que también eran guitarristas que estaban desarrollando métodos y técnicas de ejecución en ese momento. En particular, Francia, Alemania y Austria fueron los principales teatros de estos experimentos. El alemán Theodor Gaude (1782-1846) se encuadra en este ámbito y su obra ha sabido combinar diferentes estilos y formas, alternando momentos en los que la guitarra se limita a acompañar y otros en los que alterna con la flauta en la presentación de importantes elementos temáticos. Las sonatas y canciones contenidas en este álbum de Da Vinci Classics, la mayoría de ellas estrenos mundiales, resaltan estos elementos virtuosos, también gracias al compromiso de Gianluca Nicolini, flautista y Riccardo Guella, guitarrista.