Limpia tu rostro por las mañanas para empezar bien el día y, por las noches, para retirar toda la suciedad, maquillaje e impurezas.
1. Agita el producto antes de usarlo.
2. Coloca el algodón sobre el dispensador y presiona un par de veces para impregnarlo de producto (no hace falta girar el envase).
3. Extiéndelo por todo el rostro y el cuello con el algodón de forma suave, mediante movimientos circulares.
4. TIP! Si utilizas maquillaje o quieres una limpieza más profunda, por la noche aplícalo de la misma manera, pero deja reposar el algodón sobre el párpado durante unos segundos. Luego pasa a los labios y al resto del rostro.