La Navidad es una época de celebraciones, reuniones familiares y, por supuesto, deliciosas comidas. Una mesa de mariscos puede añadir un toque elegante y especial a cualquier cena navideña. Los mariscos no solo son exquisitos y festivos, sino que también ofrecen una opción más ligera y saludable en comparación con las comidas tradicionales más pesadas. Además, al ser una propuesta diferente, sorprenderá y deleitará a tus invitados.
1. Selecciona una Variedad de Mariscos: Nécoras, Cigalas, Percebes, Pulpo, Langostinos Madagascar y tigre, Gambas, Cuerpos, Quisquilla. La variedad hará que la mesa sea más atractiva y ofrecerá opciones para todos los gustos.
2. Presentación: Coloca los mariscos en grandes fuentes sobre una cama de hielo picado para mantenerlos frescos. Decora con rodajas de limón, ramitas de perejil fresco y algunas flores comestibles para añadir un toque de color y elegancia.
3. Acompañamientos: Ofrece una variedad de salsas como salsa cóctel, aioli, salsa tártara y salsa de vino blanco con mantequilla. También puedes incluir panes crujientes, tostadas o crackers.
4. Bebidas: Combina la mesa de mariscos con vinos blancos frescos.
5- Cantidad: Calcula aproximadamente 200-300 gramos de mariscos por persona para asegurarte de que haya suficiente para todos. Una mesa de mariscos puede ser el punto culminante de tu cena de Navidad, proporcionando una experiencia culinaria memorable para tus seres queridos. ¡Buena cocina y felices fiestas!
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