Recortar pequeños rectángulos o cuadraditos iguales de pasta filo. Forrar una bandeja de horno con papel vegetal o papel parafinado y disponer los rectángulos encima. Cocer durante 10 minutos en el horno precalentado a 180ºC, dándoles la vuelta de vez en cuando para que queden dorados por los dos lados. Sacar y reservar. Retirar la piel al rulo de queso con un cuchillo. Colocar las lonchas de jamón, superpuestas, sobre una encimera y disponer el rulo de queso encima. Enrollarlo completamente con el jamón de York. Poner el azúcar en una sartén y calentar hasta que se haga un caramelo; agregar un poco de romero picado y el rollo de jamón y queso. Caramelizarlo dándole la vuelta. Sacarlo y dejar que repose unos minutos antes de cortarlo en pequeñas raciones. Poner cada uno sobre un trocito de pasta filo y adornar con unas hojitas de romero. Servir enseguida.
Nota: en lugar de un rollo grande puedes hacer 4 rollos individuales, disponiendo taquitos alargados del queso de cabra sobre cada una de las lonchas de jamón, que luego se enrollan y se siguen haciendo como se explica en la receta.
Origen
El jamón cocido es también conocido como jamón de York debido a que en esa localidad británica se descubrió el sistema de curado del carnicero Robert Burrow Atkinson. Con este nombre se extendió y popularizó.
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