Un cóctel clásico y lleno de carácter, perfecto para un brunch sofisticado o una tarde relajada. Su equilibrio entre lo ácido, salado y picante lo convierte en una experiencia sensorial completa.

Pasos: Para preparar dos Bloody Mary, mezcla 9 cl de vodka con 18 cl de zumo de tomate y 3 cl de zumo de limón. Añade sal, pimienta, salsa Worcestershire y unas gotas de tabasco al gusto. Sirve bien frío en vaso alto con hielo.

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El Negroni es la elegancia italiana hecha cóctel. Su amargor refinado y su color rubí lo convierten en un aperitivo imprescindible para quienes aprecian lo clásico.

Pasos: Combina en un vaso mezclador con hielo 6 cl de Campari, 6 cl de vermut rojo y 6 cl de ginebra. Remueve suavemente y sirve en vaso bajo con una rodaja de naranja.

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Refrescante y vibrante, el Aperol Spritz es el cóctel que evoca tardes soleadas, terrazas y buena compañía. Un clásico moderno que nunca falla.

Pasos: En copas con hielo, vierte 18 cl de cava, 12 cl de Aperol y 6 cl de agua con gas. Remueve ligeramente y decora con una rodaja de naranja.

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Alegre y afrutado, este cóctel es ideal para momentos desenfadados. Su perfil dulce y suave lo hace muy accesible y siempre apetecible.

Pasos: Agita con hielo 6 cl de vodka, 3 cl de licor de melocotón y 9 cl de zumo de naranja. Sirve en vaso largo con hielo.

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Icónico y atemporal, el Dry Martini es un cóctel que destila clase. Ideal para quienes disfrutan de sabores limpios y secos.

Pasos: Mezcla 12 cl de ginebra con 3 cl de vermut blanco. Remueve con hielo y sirve en copa con tres aceitunas y una tira de corteza de limón.

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Un clásico mexicano con el equilibrio justo entre acidez y dulzor. Refrescante y con carácter, es una invitación al disfrute.

Pasos: Agita 15 cl de tequila con 5 cl de Cointreau y 5 cl de zumo de lima. Sirve en copa escarchada con sal y hielo al gusto.

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Con su distintiva presentación en vaso metálico, el Moscow Mule ofrece una mezcla perfecta entre la frescura del jengibre y la acidez de la lima.

Pasos: Exprime el zumo de dos limas y mézclalo con 9 cl de vodka y 66 cl de ginger beer. Sirve con hielo y hojas de hierbabuena.

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El cóctel ideal para quienes no renuncian al café, ni siquiera por la noche. Intenso, elegante y con un toque de dulzor.

Pasos: Mezcla 6 cl de café espresso, 5 cl de licor de café y 10 cl de vodka. Añade azúcar al gusto, agita con hielo y sirve en copa de cóctel.

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Una variante cítrica y vibrante del clásico Spritz. El limoncello aporta frescura y personalidad a este cóctel ideal para el verano.

Pasos: Combina 10 cl de limoncello con 15 cl de cava y 5 cl de agua con gas. Sirve con hielo y una rodaja de limón.

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Símbolo de sofisticación moderna, el Cosmopolitan destaca por su sabor afrutado y su elegante color rosado. Perfecto para una ocasión especial.

Pasos: Agita 15 cl de vodka con 10 cl de Cointreau, 10 cl de zumo de arándanos y el jugo de dos limas. Sirve en copa de cóctel.

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