Cómo elegir un carrito de bebe cómodo y seguro para los pequeños

Homologación europea y claves de los sistemas de seguridad infantil

Una de las principales características en las que nos fijamos a la hora de comprar un carrito de bebé es en los sistemas de seguridad. Aquí nada es al azar, de hecho, todos los carritos comercializados en Europa deben ajustarse a la normativa de seguridad infantil UNE EN 1888, que establece una serie de requisitos técnicos mínimos. Esta certificación garantiza, entre otras cosas, que el carrito sea estable, resistente, fácil de frenar y que no presente piezas pequeñas o aristas peligrosas para el bebé.

Más allá de eso, es importante fijarse en los elementos concretos que refuerzan la seguridad del bebé en el día a día: arneses (preferiblemente de cinco puntos), frenos de fácil acceso, sistema de bloqueo de ruedas y estructuras robustas pero ligeras. Si se trata de un modelo 3 en 1 (que combinan capazo, grupo 0+ y silla en una misma estructura) es fundamental que tanto el capazo como el grupo 0+ cumplan también con la normativa específica de cada etapa, especialmente si se van a usar como sistema de retención infantil en el automóvil. Porque, en esta etapa, la tranquilidad también pasa por saber que todo está bien anclado, bien pensado y bien protegido.

En El Corte Inglés encontrarás carritos de las mejores marcas (Bugaboo, Jané, Joolz, Be Cool, Cybex, Maxi-Cosi, Chicco, Casualplay, Inglesina y Stokke, entre otras) fabricados con todas las garantías de seguridad y conforme a la homologación europea. 

Peso, dimensiones y el desafío del plegado exprés

Además, hay otras consideraciones a tener en cuenta a la hora de declinar la balanza por uno u otro modelo. Hablamos del peso, el plegado y el tamaño. Tres factores decisivos que no podemos pasar por alto al elegir carrito de bebé.

Ruedas y suspensión: cómo afectan al confort del bebé

Vamos a ponernos un pelín técnicos, pero con motivo: las ruedas y la suspensión no solo hacen más fácil empujar el carrito, también determinan cómo va a ir tu bebé en él. Y no es lo mismo pasear por el centro de la ciudad que aventurarse por caminos de tierra, parques con bordillos o aceras que parecen una pista de obstáculos. En ese sentido, las ruedas pequeñas y rígidas, habituales en los carritos más compactos, funcionan bien para distancias cortas y superficies lisas, pero, si tu idea es caminar a diario o moverte por zonas menos urbanas, lo mejor es apostar por ruedas grandes (al menos las traseras) y con cierto grosor. Por ejemplo, el carrito Inglesina Aptica XT 2025 está diseñado para terrenos más difíciles, con un chasis más robusto y ruedas grandes con rodamientos dobles que absorben mejor las vibraciones de cualquier terreno.

La suspensión de las ruedas del carrito es otro punto clave y muchas veces se pasa por alto. ¿Por qué es importante? Porque amortigua los baches, los cambios de superficie y los giros bruscos. Y eso se nota, sobre todo, cuando el bebé duerme. Existen tres tipos de ruedas: sin suspensión (para terrenos lisos); con suspensión delantera o trasera (que puede soportar diferentes tipos de terreno) y con suspensión en todas las ruedas (adecuado para todo tipo de terrenos y superficies). Si no te la quieres jugar y buscas un carrito que se adapte a todos los terrenos, mejor elegir esta última opción. Hay marcas, como Bugaboo, que la incorporan a todos sus modelos. 

Así que, si estás en pleno proceso de decidir cómo elegir carrito de bebé, ten muy presente estos aspectos. A la larga, son los que acabarán definiendo tu grado de satisfacción. 

Manillar ajustable y reclinado: la ergonomía bajo lupa

Seguimos en modo técnico para abordar otro de los puntos clave a la hora de decantarse por un modelo: el manillar y el reclinado. Si te preguntas cómo elegir carrito de bebé que funcione bien tanto para el bebé como para ti, este es uno de esos apartados que no conviene dejar para el final. La comodidad y la salud lumbar de quien empuja también cuenta, sobre todo al final del día.

Capotas y cubrepiés: imprescindibles ante cualquier inclemencia

En invierno, protegen del frío y la lluvia; en los meses más calurosos, son imprescindibles para que el sol no dañe la delicada piel de tu bebé. Ahora bien, hay tantos modelos y con tantas características que no está de más tener una idea general que nos permita elegir con cabeza.

Elegir bien estas piezas no solo mejora el confort del bebé: también te da margen de maniobra para adaptar el carrito a cada estación sin tener que hacer malabares. Porque, si algo vas a querer durante el primer año, es salir a pasear con tranquilidad, haga el tiempo que haga.