El mejor equipamiento para iniciarse en pilates

Lo que tienes que saber antes de empezar a practicar pilates

Al empezar a practicar pilates, es importante comprender que se trata de un viaje. Con constancia, tu comprensión de los conceptos se profundizará.

Pilates trabaja todo el cuerpo; mientras estabilizas una parte del cuerpo, otra se mueve. Es posible que algunos movimientos o amplitudes de movimiento deban ser menores al principio y aumenten con el tiempo a medida que te fortalezcas.

El control y la precisión son dos principios del método. Elige siempre la calidad antes que la cantidad, y cosecharás efectos más beneficiosos para tu cuerpo y tu vida.

La respiración, otro principio importante, es esencial en los ejercicios de Pilates. La respiración Pilates aumenta tu capacidad pulmonar y es la precursora del movimiento.

La respiración pilates se centra en la respiración tridimensional a través de la caja torácica y el diafragma para permitir un compromiso más profundo del núcleo. El núcleo abarca los músculos de la zona lumbar, los abdominales, los glúteos, las caderas, la cara interna de los muslos y el suelo pélvico.

Al trabajar los músculos centrales durante los ejercicios de pilates, intente activarlos de forma flexible, en lugar de sujetarlos. Piensa en tu tronco como si envolviera y levantara en lugar de «meter la barriga».

No te alarmes si tu instructor utiliza indicaciones que te parecen un poco extrañas al principio. Pilates es un ejercicio único, y a menudo puede parecer como aprender un idioma extranjero cuando estás empezando. Intenta acercarte a los movimientos con espíritu de exploración y puede que te sorprenda lo que descubras.
 

Plan de entrenamiento de pilates para principiantes

Si tuvieras que elegir una cosa en la que centrarte o dominar al principio, sería tu respiración.La respiración aporta vitalidad, trabaja en sincronía y es la clave para un compromiso eficaz del tronco. Es la base de todos los ejercicios.

Lo ideal es practicar pilates tres veces por semana. Dos veces es suficiente, y una práctica diaria es posible y no supone un esfuerzo para el cuerpo. Intenta encontrar un ritmo que te funcione.

Tu cuerpo es diferente en cada momento. A medida que aumente tu autoconciencia, estarás más en sintonía con lo que tu cuerpo necesita.

Cada entrenamiento será y debe ser diferente. Cuando te sientas cansado, ve a tu ritmo. Si procede, esfuérzate por hacer algunos de los ejercicios, si no todos, para volver a sentirte con energía.