Porque los smoothies provienen de la palabra smooth (“suave” en inglés), y tiene todo el sentido del mundo, porque se trata de una bebida no sólo suave en su textura, sino que es una opción saludable y natural para tomar, de una forma deliciosa, una gran cantidad de minerales, antioxidantes, fibra o vitaminas.
Aunque la idea de mezclar zumos de frutas exóticas proviene de los países latinoamericanos, el smoothie empieza a ser muy popular en la década de los 60 del siglo pasado, cuando en California (Estados Unidos), Steve Kunhau empezó a comercializarlos a nivel masivo. A partir de ahí, el número de ingredientes y de diferentes tipos de smoothies se ha multiplicado casi hasta el infinito. Te presentamos tres opciones para este otoño, que podrás preparar en muy pocos minutos.
Usaremos calabaza, granada y leche de almendra. Cocemos la calabaza, la dejamos enfriar y trituramos con un poco de leche de almendras. Desgranamos la granada y trituramos. Servimos en un vaso los dos batidos y decorar con unos granos de granada.
Usaremos caquis, yogur y cacao. Pelamos y troceamos los caquis y los pasamos por la batidora. En un vaso ponemos yogur en el fondo, servimos el batido de caqui y terminamos con una cucharada de cacao en polvo.
Usaremos naranjas, moras y anacardos. Pelamos la naranja y la batimos junto con un puñado de anacardos. Por otro lado, batimos las moras y servimos en un vaso los dos batidos, y los mezclamos al gusto.
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