TRADICIÓN CENTENARIA.

En plena comarca de Campo de Montiel, entre Albacete y Ciudad Real, se encuentra El Jarón, una finca cercana a la villa de Torre de Juan Abad y lugar en el que la misma familia, a través de cuatro generaciones, produce desde hace más de cien años un delicioso queso con Denominación de Origen Manchego elaborado cien por cien artesanalmente. En El Jarón, para estar a la altura de las exigencias del siglo XXI, se ha mantenido la tradición centenaria, así como las recetas de elaboración de queso utilizadas por los antepasados, adaptándolas hoy a medios técnicos avanzados.

DENOMINACIÓN DE ORIGEN.

El queso manchego es un producto de clima duro, de vegetación muy rústica, la cual es alimento de una ancestral raza de ovejas que son sometidas a un riguroso control sanitario, características que le convierten en un queso único en el mundo y que le hacen ser merecedor de la Denominación de Origen Manchego.

De los pastos naturales de El Jarón, así como también de los arbustos y bellotas de sus bosques de encinas, se alimentan los rebaños de ovejas de pura raza manchega que dan origen a este delicioso queso manchego. Gracias a la cuidadosa y equilibrada alimentación del ganado, libre de aditivos y procedente de los verdes pastos y campos de cereales de la finca, los quesos Señorío de Quevedo destilan un aroma y sabor especiales.
 

PRODUCTO DE CALIDAD.

Su intenso y suave sabor, la unión de su consistencia y su aroma en el momento del consumo, le convierten en un valor seguro cuando de elegir un buen queso manchego se trata. Los ojos repartidos irregularmente en toda la pasta de color blanco marfil le dan un atractivo aspecto y evidencian su correcta madurez y pureza.

“Los ojos, repartidos irregularmente en la pasta color marfil, le dan un atractivo aspecto y evidencian su madurez”

Señorío de Quevedo se presenta en su corteza natural, a la que previamente se le ha aplicado aceite de oliva extra virgen durante su proceso de maduración con el fin de obtener el color característico de la corteza. Según va madurando, su textura se va espesando, en el queso semicurado desde una elasticidad media a una solidez más pronunciada en el queso curado, sin llegar a secarse nunca en exceso. Señorío de Quevedo ha sido galardonado en numerosas ocasiones por su esmerada higiene en todo el proceso de producción y manipulación.