Así hay que aplicarse el corrector de ojeras para una mirada más bonita y despierta

Camuflar las ojeras sin que el resultado sea peor que la propia ojera es tal vez uno de los ejercicios más complicados del maquillaje. Requiere técnica y un profundo conocimiento de las texturas, tonos y herramientas, así como de las características propia piel de la zona delicada del contorno de los ojos. Abusar de cantidad de producto, elegir mal el tono, no difuminar bien y (¡ojo!) utilizar iluminador en vez de corrector son algunos de los errores más frecuentes al enfrentarse a esa desafiante empresa de intentar camuflar las ojeras.

Otro error habitual es comenzar el proceso sobre una base mal preparada. Y es que un contorno de ojos perfectamente hidratado es el paso número uno para lograr que el corrector de ojeras cumpla su función de camuflar, y no la contraria, resaltando o acentuando aún más las diferencias de pigmentación, la textura irregular o las finas líneas de expresión que se pretenden disimular. Cuando la piel no está bien hidratada y elástica el resultado es que el maquillaje se cuartea y se deposita en las líneas y arruguitas, lo que da lugar a una mirada apagada y opaca que transmite sensación de cansancio y aspecto descuidado. Toma nota de los tres pasos para aplicarte el corrector de ojeras y lucir una mirada más bonita y despierta.

1. Elige la textura adecuada

Las texturas demasiado espesas pueden “acentuar las líneas finas y las pequeñas irregularidades de la piel, algo que queremos evitar a toda costa”, dice Patricia Alonso, maquilladora oficial de Perricone MD. La clave para evitar este efecto de ojera cargada es tratar primero la piel con un buen contorno de ojos hidratante y, sobre esa base, “aplicar un corrector de ojeras ligeramente más claro, mejor de textura fluida o suero con color”, añade. 

La ventaja de las texturas fluidas o muy ligeras es que se aplican muy fácilmente y no marcan las líneas de expresión. Además, hay que tener en cuenta que textura ligera no implica menor cobertura. De hecho, existen contornos de ojos muy fluidos pero de alta pigmentación que brindan resultados muy cubrientes con muy poca cantidad de producto.

Los mejores correctores de ojeras de textura fluida o de sérum

2. Acierta con el tono

“Opta por un tono similar a de tu piel si quieres cubrir pequeñas imperfecciones y unificar el rostro; o un tono más claro si lo que buscas es iluminar la pigmentación azulada o más oscura de la piel de la cuenca del ojo”, dicen en NYX.

“El concealer asalmonado es el más versátil”, indica Marta Arce, maquilladora y codirectora de imagen creativa de U/1ST. “Ten cuidado de no elegir tonos demasiado claros, pues crean un efecto ojos de panda nada deseado”, dice. Utilizar por error un iluminador en vez de un corrector con el objetivo de camuflar la ojera es otro de los errores comunes que suele provocar el efecto ojos de panda.

Nuestra selección de correctores de ojeras para todos los tonos de piel

3. Aplica y difumina

Para aplicar bien el corrector hay que depositar una pizca “justo encima de la zona cuyo color queremos neutralizar –sin acercarte demasiado a la línea de agua de las pestañas– y difuminar bien hasta lograr que se funda perfectamente con nuestro tono de piel”, indica Marta Arce, de U/1ST.

“Puedes aplicarlo con los dedos, pincel o esponja. En zonas pequeñas o de difícil acceso lo ideal es utilizar un pincel y rematar con la yema del dedo para que el acabado sea 100% natural. En la ojera más amplia podemos aplicar el corrector con los dedos”. Empieza con muy poca cantidad y añade un poco más solo si es necesario hasta neutralizar totalmente el color de la ojera. Difumina sin arrastrar, a toques con los dedos o con la brocha, hasta que se funda con la piel.

Correctores de ojeras con pincel, esponja o aplicador