Los mejores polvos de sol para un efecto 'sun kissed'
Creatividad: Paula Jara Xelmírez
Lucir en cualquier época del año esa belleza natural y sin esfuerzo que exhibe la piel en verano es uno de los desafíos constantes del maquillaje. Pero, a medida que los días se vuelven más largos y luminosos, la energía estival va contagiando poco a poco la atmósfera y nuestro mood.
Es en este preciso momento, con los primeros rayos de sol, cuando deseamos “conseguir una piel bronceada cuanto antes y lucir un aspecto dorado sin necesidad de rayos artificiales ni de productos autobronceadores”, dicen en Maybelline New York. Así, los polvos de sol se han convertido de un tiempo a esta parte en un producto de maquillaje fetiche de las mujeres cosmopolitas. Son la alternativa al sol “que usan las neoyorquinas mientras esperan el ansiado verano”, bromean en la firma.
Cómo se hace el efecto 'sun kissed'
Inspirado en la luminosidad de la piel tras días de playa, el efecto sun kissed o sutil bronceado de piel bañada por el sol ha sido unos de los looks en tendencia cada primavera. “Este look potencia la calidez del rostro con un acabado de piel radiante”, dicen en Givenchy. Tiene a su favor que es fácil de recrear y favorece a todos los tonos de piel. Para recrearlo basta con aplicar los polvos de sol con una brocha de contorno “en las zonas del rostro donde el sol besaría naturalmente la piel: sienes, pómulos tabique y punta de la nariz y línea de la mandíbula”, añaden en Givenchy. Una vez marcadas estas zonas estratégicas, “difumina el resto de pigmento de la brocha a lo largo del cuello hacia la clavícula, repitiendo los gestos varias veces con toques suaves y ligeros, como acariciando la piel”, dicen en Guerlain.
Nuestros polvos de sol favoritos para una piel besada por el sol
Dos trucos profesionales para un acabado 'sun kissed' súper natural
Hay dos gestos sencillos, intuitivos e infalibles que hemos aprendido de los maquilladores profesionales para lograr un efecto saludable y de tez cálida al maquillarnos con los polvos de sol:
- En forma de “3”. Desde arriba hacia abajo, aplica los polvos con una brocha gruesa dibujando un 3 desde la frente hasta la barbilla. Comienza en la frente y en las sienes, sigue por debajo de los pómulos y finaliza bajo la línea de la mandíbula. Repite en la otra parte del rostro.
- En forma de “W”. De sien a sien. Comienza en una de las sienes, baja en diagonal hasta el centro del pómulo, sube en diagonal hasta el puente de la nariz. Baja de nuevo hasta el centro del otro pómulo y finaliza en la sien.
Si buscas un efecto esculpido o de contouring (más sofisticado, por ejemplo para asistir a un evento), el truco es combinar dos tonos de polvos de sol. “Aplica el tono más oscuro con un movimiento lineal a lo largo de la parta baja del hueso del pómulo para definir. Y el tono más claro con movimientos circulares sobre el centro del pómulo y otros puntos altos estratégicos del rostro (como el tabique de la nariz y la punta de la barbilla) para iluminar.
Nuestra selección de brochas para aplicar los polvos de sol
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