Una rutina de belleza para cada destino de verano

Tu cerebro asocia el verano con sol, playa, chiringuito… pero lo cierto es que solo muy pocos viven esa realidad.
Para otros, el verano también es sinónimo de soportar altas temperaturas trabajando y con una gran dificultad para conciliar el sueño.
La dermis lo nota y, el resultado se traduce en una piel seca, engrosada, mate y con más arrugas.
Además, el maquillaje se te hace pesado, pero aún no puedes prescindir de él.
Adaptar tu rutina de cuidados al lugar en que te encuentres en cada momento es fundamental para conseguir unos resultados óptimos.
En la playa
Unos días junto al mar son buenos para el organismo. Se sintentiza vitamina D gracias al sol y se consigue una piel más tersa, debido a las sales minerales y a los oligoelementos del agua.
La unión del sol, la sal, la arena y el agua del mar es una terapia de salud y belleza.
¡Pero cuidado!
Descuidar la piel puede traducirse en fotoenvejecimiento, manchas y quemaduras. 15 minutos diarios de sol son más que suficientes.
¿Las claves? Protección solar con un índice alto, exposición gradual, evitarlo en horas puntas (entre las 12:00 h. y las 16:00 h.) y lo más importante: no descuidar tu rutina de belleza.
Limpiar
Los restos de protección solar mezclado con el sudor, la sal y la arena crean una capa que no solo ensucia la piel sino que no le deja respirar.
Un bronceado bonito solo es posible con un cutis limpio.
Hidratar y proteger
Crema de día, crema de noche y un buen contorno de ojos.
Básicos para tener la piel hidratada pero, aún más en esta época del año, ya que el sol y la sal del mar la resecan con mayor facilidad.
Reparar y sublimar
¿Quieres un bronceado perfecto? Preparar la piel y sublimar el tono conseguir es tan importante o más que la exposición al sol.
Aftersun y potenciadores del color, así como un plus de tratamiento realzan el brillo natural.
Cuerpo en primer plano
El sol agota las reservas de agua de la piel, por lo que al final del día es necesario una dosis extra de hidratación.
Si el aftersun ha sido y es el gran aliado del verano, aplicar una hidratante más puede ser la clave para conseguir una mejor regeneración de la piel.
Además, la noche también es el mejor momento para aplicar tratamientos específicos.
En la ciudad
El verano en plena urbe no es un mal plan. Solo recuerda que, si trabajas, los cuidados varían de los de invierno y, si estás de vacaciones, difieren de los de playa.
Los meses de calor siempre son un buen momento para disfrutar de las terrazas, las citas con los amigos y las noches estrelladas en azoteas.
Los días son más largos y la dermis debe luchar contra el sol, el calor y la polución. Si estás trabajando, súmale el estrés y la falta de sueño.
Tu rutina de belleza diaria debe ser reforzada con tratamientos de choque en forma de ampollas y mascarillas, sérums y nutricosmética. Todo es poco para lucir bella y sana en cualquier momento y lugar.
Ampollas y mascarillas
Su combinación de principios activos de alta tecnología cosmética las convierten en fórmulas mágicas capaces de reducir arrugas y recuperar volúmenes en cuestión de minutos.
La contaminación ataca
Las moléculas de polución unidas a otras partículas que ensucian el rostro y los obstruyen se traduce en una dermis llena de imperfecciones.
Tomar medidas para protegerte es necesario.
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Cuidado capilar
Las altas temperaturas, el viento, el sol y el cloro no solo afectan a la piel. El cabello también se daña, pierde fuerza, se seca, se abren las puntas y se debilita.
Es momento de no dejar los buenos hábitos, para mantener la melena cuidada y protegida.
Utiliza tratamientos capilares.
Celulitis fuera
La falta de oxígeno y nutrientes en las células y tejidos genera una acumulación de tejido adiposo. La grasa, los problemas circulatorios y la retención de líquidos son algunas de las causas.
Lo cierto es que es casi imposible de eliminar, pero se puede mejorar el aspecto con cosméticos, ejercicio físico y una dieta equilibrada.
En la alta montaña
Si eres amante de las alturas, además de protección solar, necesitas una rutina adaptada a tu actividad non stop con productos específicos para ello.
Refrescar
Los ideal son productos que aligeren las molestias provocadas por el calor y aquellos oil-free, para evitar que se mezclen la grasa y el sudor y provoquen una sensación desagradable.
Son los grandes aliados para un día en el campo.
Reforzar
La práctica habitual de actividades en la alta montaña requiere una piel fuerte y sana para defenderse contra las inclemencias del medio ambiente, que a mayor altura es más agresivo.
Además de protección solar, se debe utilizar hidratante de rostro e hidratante de cuerpo y nutrir dos veces al día.
Cosmética natural
Cuidar la piel sin descuidar el planeta es cada vez más fácil, gracias a cosmética que minimiza los residuos, emplea envases reciclados y reciclables y cuenta con ingredientes respetuosos con la naturaleza.

Este es el maquillaje que más te favorece según tu tono de piel (sin renunciar a las tendencias)

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