Red WiFi Mesh: ¿qué es y cómo puede mejorar la red WiFi en casa?

Si vives en un apartamento muy compartimentado o en una casa de cierto tamaño, seguramente estarás familiarizado con el problema de la recepción de la conexión WiFi. Hay esquinas de la vivienda donde la red se recibe de forma intermitente o simplemente no llega, provocando desconexiones o dando lugar a velocidades de descarga y juego poco fluidas. Las redes Mesh (o en malla), son la solución.
Esta tecnología ha sido diseñada para ampliar la cobertura de una red WiFi ya existente, brindando conexiones rápidas, seguras y estables en toda la vivienda. No importa si tienes paredes de ladrillo sólido, múltiples plantas o pilares de por medio: con una red mallada, tus problemas de conexión desaparecerán. Te enseñamos cómo.
Qué es una red WiFi Mesh

Las redes WiFi Mesh ─o en malla─ son redes de comunicaciones inalámbricas diseminadas, puesto que poseen múltiples nodos o puntos de acceso sincronizados con el router. Como indica su nombre, funcionan creando una malla con puntos de conexión.
Así, en lugar de tener una única caja dando conexión WiFi a todo el hogar, encontraremos el router y múltiples nodos, todos ellos en una misma red.
El hecho de que todos los nodos o puntos de acceso pertenezcan a una misma red WiFi diferencia a las redes Mesh de algunos extensores que lo que hacen en realidad es crear otra red WiFi separada conectada a la actual. Esto último puede aumentar la cobertura, pero también generar problemas que examinaremos a continuación.

Una red WiFi Mesh consta básicamente de dos componentes: un router y los nodos de acceso. A más nodos de acceso, mayor distancia podremos cubrir. Por supuesto, no todos los routers están preparados para gestionar una gran cantidad de nodos. Por tanto, si ya tenemos un enrutador doméstico instalado, antes de comprar un paquete de nodos deberíamos informarnos sobre sus capacidades mesh.
Si tenemos dudas o no contamos con un router adecuado, es recomendable comprar un paquete preconfigurado con su router y sus nodos de acceso. Google, por ejemplo, dispone de sus kits Nest Wi-Fi y los más modernos Google Wi-Fi en forma de packs, ofreciendo un router con un nodo y luego nodos independientes para ir aumentando la cobertura. Otros fabricantes siguen la misma fórmula u ofrecen un número aún mayor de nodos para cubrir pisos muy grandes o casas con más de dos plantas.
Con la cantidad de nodos adecuada, podremos crear redes capaces de cubrir viviendas con 500 metros cuadrados en múltiples plantas e incluso superficies más grandes.
Ventajas y beneficios de las redes WiFi Mesh

La naturaleza distribuida de las redes WiFi Mesh proporciona algunas ventajas muy importantes frente a usar solo una red WiFi o varias separadas. También puede ser más recomendable que una conexión de tipo PLC en función de las circunstancias.
- Las redes Mesh no generan una nueva red WiFi como algunos mal llamados extensores, por lo que no hay que introducir nuevas claves ni reconectarse.
- Al haber una única red en toda la casa, es posible cambiar de plantas o habitaciones sin perder la conexión.
- Son redes con un gran nivel de seguridad y diseñadas para brindar la latencia más reducida posible.
- Los nodos son bastante pequeños y de estética cuidada. Han sido pensados para ser puestos en cualquier rincón del hogar. A diferencia de un router, no llaman la atención.

- Los nodos de acceso solo necesitan una toma de corriente. Puesto que se pueden poner en cualquier rincón de la casa, no se generan zonas de sombra o sin conexión en lugares más apartados. Y si vives en una casa muy grande, siempre puedes añadir más nodos.
- No es necesario pasar metros de cable Ethernet por el rodapié o el techo para crear una red doméstica de gran tamaño. Tu WiFi, simplemente, crece sin variar su funcionamiento de cara al usuario.
- Es posible gestionar nodos de forma remota. De esta forma, se pueden filtrar los contenidos para invitados, crear contraseñas específicas o incluso asociar horarios de conexión a nodos concretos. Por ejemplo, los utilizados por los niños.
- Son la forma más rápida y práctica de extender una red WiFi estable para sistemas domóticos con múltiples dispositivos (cámaras, termostatos, sensores de ocupación, alarmas etcétera).
Cómo instalar una red WiFi Mesh en casa

Virtualmente, todos los kits de red WiFi Mesh disponibles en la actualidad vienen con una aplicación móvil que nos permite encontrar el mejor lugar para colocar el nodo, así que lo único que tenemos que hacer es encontrar un enchufe disponible. Basta con asegurarnos de que ponemos el nodo en un punto donde la recepción WiFi sea buena a pesar de la distancia.
Muchos modelos de nodo para redes Mesh incorporan además una conexión Ethernet. De esta manera, si nuestra casa cuenta con tomas de red en los enchufes de la pared (algo frecuente en viviendas inteligentes modernas), podemos conectarlos usando un cable lo más corto posible. Nos darán una estabilidad aún mayor que usando únicamente la conexión WiFi del router.

Finalmente, algunos kits como el TP-Link Deco P9 combinan la red WiFi Mesh con la tecnología PLC, de modo que podemos ampliar la cobertura del sistema y disponer los nodos aún más lejos que usando solo el alcance WiFi del router, puesto que pueden valerse de la corriente eléctrica del enchufe para transmitir datos. Así, con solo dos nodos es posible cubrir hasta 560 metros cuadrados. Son una opción estupenda para viviendas de gran tamaño.
En todos los casos, la conexión es sumamente simple, ya que han sido diseñados para ser instalados por el usuario común. No necesitarás herramientas especiales y, en solo unos minutos, dispondrás de la mejor conexión posible en casa sin que importe cuántas paredes o columnas haya de por medio.

Las tendencias tecnológicas que nos esperan en 2024

¿Por qué los auriculares con cancelación de ruido son perfectos para utilizar en casa?

Las dudas que siempre tuviste sobre comprar tecnología reacondicionada resueltas en 5 puntos

iPhone 14: todas las características de la nueva gama insignia de Apple