Claves para elegir los pantalones premamá

¿Cuándo hay que empezar a utilizar ropa premamá?
A medida que avanza el embarazo y tu tripa crece tus pantalones de siempre comenzarán a apretarte. Al principio lograrás abrochártelos, aunque sea a duras penas. Pero llegará un momento en que la curva del vientre y la cintura cada vez más ensanchada, harán que sea imposible ponértelos. Es inevitable que tengas que guardar en el armario durante algún tiempo tu ropa de siempre.
El momento dependerá de cada mujer y de cada cuerpo, ya que no a todas las futuras mamás les crece la tripa al mismo ritmo ni todas alzanzan el mismo tamaño en la misma semana. Cada cuerpo tiene una constitución distinta, aunque lo habitual es tener que empezar a vestir ropa premamá a partir de la semana 15 o semana 16 de embarazo.
Haz un plan de compra para ahorrar gastos innecesarios. Algunas partes de arriba holgadas (si prefieres ir oversize) o ceñidas (si te gusta que tus curvas premamá se marquen) serán suficientes. Si es invierno, necesitarás un abrigo o plumífero amplio que puedas abrocharte cómodamente. En verano, bañador premamá y vestidos fluidos, que pueden resultar muy versátiles también después de dar a luz.
Sin embargo, puede que sí tengas que renovar prendas como la ropa interior, los pantalones o los pijamas, haciéndote con modelos específicos premamá. Durante el embarazo el pecho de la futura madre crece por lo que es probable que tus sujetadores te vayan quedando estrechos. Puedes optar por comprar algún sujetador premamá que además te sirva para amamantar después de dar a luz. Recuerda que durante la lactancia los senos también van a crecer.
Las braguitas y los pijamas o camisones también resultarán más cómodos si tienen un diseño para el embarazo y harán que te sientas cómoda a medida que tu tripa y tus caderas crezcan.
Los vaqueros premamá, la prenda comodín
Independientemente del estilo y de las preferencias de cada futura mamá, lo más importante durante el embarazo es llevar prendas que se acomoden al crecimiento de la tripa. Esto no significa en absoluto invertir mucho dinero en compras premamá ni llenar el armario con prendas que solo te pondrás durante unos meses. Basta con tener en cuenta algunas recomendaciones, muy especialmente en el caso de los pantalones premamá.
Hay miles de opciones de pantalones vaqueros premamá. El truco suele ser que incorporan un elástico en la cintura que se va adaptando mientras la barriga crece, desde que es una simple curva abultada hasta que toma dimensiones prominentes.
Claves para elegir los pantalones premamá
A la hora de elegir un pantalón, sea del tipo que sea, es importante probárselos para saber cuál es la talla más adecuada (que mejor se ajuste a tu cuerpo sin que te aprieten y con el que te sientas más cómoda), algo que dependerá del tamaño de la barriga y de lo que se haya engordado. Quizás solo sea necesario una talla más de la que utilizabas normalmente, o la misma de siempre pero en modelo premamá.
Recuerda escoger pantalones de cintura baja y ajustable, con capacidad de estirarse y reducir la tensión en la zona lumbar y abdominal. Además, este tipo de pantalones también suavizan la silueta.
Otra opción es pedir ropa premamá prestada a amigas, familiares o compañeras de trabajo. Si han sido madres recientemente tal vez tengan prendas en el armario que no les importará compartir.
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