Una navidad muy felina
La vida de Rafa cambió cuando Alf y Ania llegaron a ella. Juntos han vivido mil momentos especiales y la Navidad no podía ser menos.
Alf, el rubio de la casa, llegó a casa de Rafa de manera temporal hace 7 años y lo que iba a ser una acogida se convirtió en una adopción: con su simpatía y ronroneos consiguió que Rafa lo adoptara y un hogar para toda la vida. Un año después llegó Ania y, como buena gata, desplegó sus encantos felinos y Alf le dejó ser su amiga para siempre. A Rafa fue aún más fácil engatusarle y, desde entonces, los tres son una gran familia muy unida.
¿Cómo te cambió la vida la llegada de Alf y Ania?
La verdad es que más que cambiarla, la han completado. Nunca había tenido contacto con animales domésticos cuando vivía con mis padres pero, después de casi 9 años con Alf y 8 con Ania, no puedo estarles más agradecidos de que estén compartiendo su vida conmigo.
¿Qué momentos os gusta celebrar juntos en Navidad (y también en vuestro día a día)?
Pues la verdad que los mismos que el resto del año: estar en el sofá, que se acurruquen a mi lado y oírles sus ronrroneos. Con eso ya me es más que suficiente.
En Navidad, ¿sueles hacerles regalos? ¿Qué crees que les gustaría recibir este año?
La verdad es que no suelo regalarles muchas cosas, pero sí que me gusta que tengan unos rascadores molones y amplios para que puedan disfrutar tanto dentro de casa como en una terracita que tengo para el verano. De hecho, como a todos los gatos, lo que más les gusta es meterse en la caja de embalaje mientras yo monto el rascador. Así que suelo dejarlas en casa hasta que se aburren de ellas. También les encanta jugar con cañitas y con alguna pelota. Mis niños no están muy consentidos (risas).
¿Alguna anécdota divertida que recuerdes de las navidades pasadas?
Sí, además es una anécdota de novato: puse un par de árboles de Navidad, pero pequeñitos (de unos 5 cm de alto), ya que es muy osado tener decoración navideña con ellos e, indudablemente, duraron cero coma.
¿Qué hace tan especial a Alf y Ania?
A Alf, al ser mi primer gato, pues yo creo que todo. Él me hizo descubrir cómo eran los gatos caseros y lo que nos demandan, fue un apredizaje muy chulo. Eso sí, es un nervio puro. Y Ania es el contrapunto de Alf. La adopté para que le hiciera compañía a Alf ya que, debido a mi trabajo, pasaba mucho tiempo solito. Ania es más calmada y tranquila. Son la pareja perfecta.
En tu carta a Papá Noël o los Reyes Magos, ¿qué deseo pedirías para 2020 relacionado con los animales?
Lo de todos los años: que no hubiese abandonos, que la gente fuera consciente de que tienen sentimientos, no cosas que si te cansas las puedes desechar. Y también me gustaría dar mi gratitud y un gran recuerdo al montón de personas que dedican su tiempo, esfuerzo y dinero a gestionar colonias callejeras, por el gran trabajo que realizan. Tengo la suerte de conocer a unos cuantos y a ellos va mi reconocimiento para 2020.
¡FELICES FIESTAS FELINAS!
Esta pareja felina no puede ser más diferente y complementarse mejor, como nos cuenta Rafa. "A Alf no le gusta la comida húmeda y sólo le gusta el pienso para gatos, mientras que Ania es un glotona, con la que tengo que tener cuidado porque tiene inclinación a engordar y no le viene bien para su artrosis. Aunque es joven todavía (8 añitos), ya hay que empezar a cuidarle la alimentación. Esta Navidad no les faltará de regalo, además de juguetes y algún accesorio nuevo, alguna delicatessen felina gastronómica. Y las visitas y celebraciones navideñas las viven de manera diferente ya que Ania es menos tímida que Alf y le encanta estar con gente, y al rubio no le gustan los tumultos de gente en casa, desaparece y si ve que luego el ambiente está relajado, sale un ratillo y ya socializa".
LA REINA DE LA CASA
"Ania es más tranquila y le encanta estar pegada a mí, necesita dormir conmigo y es completamente feliz así. Y eso que desde que empezó con sus problemas de artrosis, a pesar de que tengo que controlarle la alimentación y no darle todo lo que a ella le gustaría comer, sigo siendo su humano preferido y me perdona. Y es que aunque sigue estando en plena forma, si le das a elegir entre jugar, comer o que le den mimos, ella lo tiene muy claro y apuesta siempre por la compañía humana".
AMOR A PRIMERA VISTA
Rafa nos cuenta entre risas que "El día que Alf llegó a casa lo primero que hizo fue irse al sofá a "repanchingarse" y se empezó a lavar. Desde ese momento sabía que iba a ser dificil que saliera de mi vida. En estos años he descubierto su afición a mordisquear cajas de cartón, le encanta el papel higiénico y se desvive por cualquier muñequito o juguetito que es susceptible de ser linchado, arrastrado y volteado. Le encanta cotillear por la ventana desde su rascador o camita".
